En 2025, el panorama fiscal en España ofrece una oportunidad única para que las empresas impulsen su crecimiento y gestionen sus inversiones con mayor acierto. Con medidas diseñadas para promover la innovación, la sostenibilidad y la generación de empleo, el momento de planificar y aprovechar estas ventajas es ahora.
El Gobierno ha articulado varias vías para reducir la carga fiscal y fomentar la inversión en proyectos estratégicos. Comprender cada alternativa permite diseñar una estrategia financiera integral y maximizar el retorno.
Para las deducciones de I+D+i, por ejemplo, se aplica un 25% de los gastos en I+D y hasta un 42% sobre montos superiores a la media de los dos años anteriores. Además, el personal investigador exclusivo cuenta con un 17% adicional.
La innovación tecnológica disfruta de un 12% de deducción sobre gastos justificados. En todos los casos, es esencial documentar con rigor los gastos y, preferiblemente, obtener informes motivados para garantizar la seguridad jurídica ante la Administración.
La amortización acelerada mejora la liquidez al adelantar deducciones fiscales en bienes de inversión. Para proyectos verdes, la libertad de amortización está prorrogada hasta el 31/12/2025, siempre que se reemplacen combustibles fósiles y semantenga la plantilla.
Este año destaca por nuevos incentivos centrados en el crecimiento del empleo y la fiscalidad mínima para grupos grandes:
• Deducciones por incremento de plantilla: 23% si el aumento es del 2% al 5%, 26,5% para un 5-10% y hasta 30% cuando la subida supera el 10%. El incremento debe mantenerse al menos tres años consecutivos.
• Imposición mínima del 15% para grupos con ingresos superiores a 750 millones de euros, garantizando una tributación mínima.
• Límites a la compensación de bases imponibles negativas: 70% para ingresos menores de 20 millones, 50% entre 20 y 60 millones y 25% por encima de ese umbral.
Convertir la normativa en una palanca de crecimiento requiere planificación y coordinación interna. Sigue estas pautas:
Contar con un asesoramiento especialista y mantener una comunicación fluida con la Administración reduce riesgos y garantiza un aprovechamiento óptimo.
Los incentivos están alineados con los grandes ejes de la política económica y ambiental, favoreciendo:
Invertir en estos ámbitos no solo aporta ventajas fiscales, sino posiciona a la empresa como líder en transformación y competitividad.
Para asegurar el éxito al aplicar estos incentivos, ten en cuenta:
Mantener la plantilla durante el período mínimo exigido, especialmente en proyectos ligados al empleo o energías verdes.
Justificar y acreditar cada gasto mediante facturas, contratos, memorias técnicas y, si es posible, informes motivados vinculantes.
Revisar constantemente los límites de facturación y las condiciones específicas de cada incentivo, adaptando la estrategia conforme a cambios regulatorios.
Al integrar estas medidas en tu plan de inversión, podrás maximizar el rendimiento de tus recursos, fortalecer tu posición en el mercado y contribuir al desarrollo sostenible del tejido empresarial español.
Referencias