Entender el CAT es esencial para cualquier persona que considere solicitar un crédito. Con esta guía, descubrirás cómo se calcula, por qué es importante y cómo puede influir en tu salud financiera.
El CAT, o Costo Anual Total, es un indicador financiero expresado como porcentaje anual. Representa el costo total de un crédito más allá de la simple tasa de interés, e incluye casi todos los cargos asociados.
Su propósito principal es permitir a los consumidores comparar de manera estándar los productos de crédito —desde tarjetas hasta préstamos hipotecarios— para tomar decisiones informadas.
Es importante diferenciar el CAT de la tasa de interés nominal: mientras la tasa nominal solo refleja el porcentaje aplicado al capital, el CAT incorpora comisiones, primas de seguros y otros costos obligatorios.
El CAT integra prácticamente todos los costos relacionados con un financiamiento:
No incluye impuestos, gastos notariales ni valoraciones externas no controladas por la institución financiera.
Para obtener el CAT, se suman todos los costos expresados como porcentaje sobre la línea de crédito promedio utilizada. Se considera el monto, el plazo, la tasa, comisiones y primas de seguro.
De esta forma, el CAT refleja un valor único que facilita la comparación entre distintos productos. A continuación, un ejemplo de valores promedio en México:
Estos porcentajes varían según el perfil del cliente y las políticas de la institución financiera.
Al considerar el CAT antes de contratar un crédito, obtienes:
Un CAT más alto implica un crédito más caro. Si eliges productos con porcentajes elevados, tu deuda total y los intereses a pagar crecerán significativamente.
Esto influye directamente en el plazo necesario para liquidar tu crédito y en tu capacidad de pago mensual. Una tasa alta podría dificultar cumplir con los pagos a tiempo y afectar tu historial crediticio.
Por el contrario, un CAT bajo favorece tu salud financiera, pues reduce el costo total del financiamiento y permite destinar más recursos a otros objetivos económicos.
El CAT fue implementado por el Banco de México y otras autoridades financieras para promover la transparencia en el sector. Desde su creación, las instituciones deben publicar este indicador en todos sus productos con más de un año en el mercado.
La regulación obliga a los bancos a calcular el CAT con base en datos reales de usuarios, acumulando valores promedio de líneas de crédito, tasas y pagos realizados.
De esta manera, se busca proteger al consumidor y fomentar una competencia saludable entre las entidades crediticias.
Antes de firmar un contrato de crédito, sigue estas recomendaciones:
Al aplicar estos consejos, minimizarás riesgos y maximizarás las ventajas de tu financiamiento.
Recuerda que un consumidor informado es capaz de elegir el crédito más económico y proteger su salud financiera a largo plazo.
Referencias